viernes, 1 de febrero de 2013

Nos hicieron creer...

Mi vida depende de mi. Es fácil decirlo, pero resulta complicado aplicarlo a la realidad. Quien no ha vivido la típica historia en la que te encariñas de alguna persona especial, y tu felicidad depende estrictamente de ella? Bien, es algo que en la vida llega a ser lógico, ya que la gente se encariña, amistades, amores.. y nuestra vida depende de la suya; es decir, dependemos de ellos para estar bien... hasta aquí es comprensible.

El problema viene en la radicalización de esta postura. Tener la facilidad de encariñarse con las personas, y llegar a depender exclusivamente de ellas para poder ser feliz. En parte, lo comprendo y  además, me doy por aludido: me ha pasado muchísimas veces. Pero en mi opinión, la parte más difícil de la vida es saber controlar esta situación. Ejemplo: Muchos de nuestros mejores amigos, y  por ejemplo también nuestra pareja, al final llegan a ser las personas más importantes de nuestra vida, dependemos de ellos para poder estar completamente bien y cuando sufren, nosotros también: a veces, mucho más que ellos. Pero en estas situaciones, sin llegar a dejarlos de lado, me gustaría que no nos olvidáramos de nosotros mismos. En esas situaciones, tenemos que intentar poner limites, porque el mundo resultaría imposible de vivir si todo lo que entristece a personas que queremos muchísimo acabara afectándonos a nosotros más que a ellas mismas.

Hay que aprender a que el estado de ánimo dependa un poco más de nosotros; casi exclusivamente de nosotros mismos. En cierto modo, es bastante complicado ser un pelín egoísta desde ese punto de vista. Pero, después de mucho tiempo, si algo he aprendido es que vivimos en un mundo donde el exceso de confianza puede tener resultados muy perjudiciales.

Por todo esto, y sin quitarle importancia a personas que verdaderamente merecen tu compañía, hay que medir la confianza que repartimos entre las personas que conocemos. Y aprender a no sufrir tanto por personas que no sufrirían por tí. En resumen, recordar que tú también existes, y que eres lo más grande que le ha podido pasar a esta vida. No te hagas sufrir si no es estrictamente necesario, hazte el favor. Porque puede que hayas preocupado en repartir confianza a todo el mundo, y que se te haya olvidado de repartirte a tí mismo tu parte de ella. ¡Y eres el que más la necesita!

Jhon Lennon decía...

“Nos hicieron creer que cada uno de nosotros es la mitad de una naranja,
y que la vida sólo tiene sentido cuando encontramos la otra mitad.
No nos contaron que ya nacemos enteros, que nadie en la vida merece cargar en las espaldas la responsabilidad de completar lo que nos falta.''

''Nos hicieron creer en una fórmula llamada “dos en uno”: dos personas pensando igual, actuando igual, y que era eso lo que funcionaba. No nos contaron que eso tiene nombre: anulación. Y que sólo siendo individuos con personalidad propia podremos tener una relación saludable.''

Y ahora, os dejo con su música:

John Lennon - Mother

(1970, John Lennon/Plastic Ono Band)                            Fuente: YouTube

¡Hasta otra Tortugas!

LaTortugaDeMN

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